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Indignación en Oaxaca por la muerte de “Lucho”, el cocodrilo emblemático de La Ventanilla

El pasado 10 de agosto, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) confirmó la muerte de “Lucho”, un cocodrilo americano (Crocodylus acutus) de entre 40 y 50 años y más de cuatro metros de largo, que desde 2005 vivía bajo resguardo en la Unidad de Manejo Ambiental (UMA) “La Ventanilla”, en Santa María Tonameca, Oaxaca.

“Lucho” no era cualquier reptil: era uno de los ejemplares más representativos de la comunidad, conocido por locales y visitantes como parte del atractivo ecoturístico de la laguna. Por eso, su muerte no solo causó tristeza, sino también sospechas.

Según versiones periodísticas, meses atrás el cocodrilo habría sido sometido a una cirugía con fines demostrativos durante un taller, sin contar con autorización de la Profepa. Esta intervención presuntamente provocó una infección que pudo derivar en su fallecimiento.

La Profepa ya presentó una denuncia penal contra la Sociedad Cooperativa Servicios Ecoturísticos de La Ventanilla, su presidente o quienes resulten responsables. La investigación buscará deslindar responsabilidades, y se solicitó a la UMA información detallada sobre el historial médico del animal, las actividades realizadas y los permisos que debían tener para cualquier procedimiento.

El cocodrilo americano está catalogado como especie sujeta a protección especial en la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010 y aparece en el Apéndice II de la Convención CITES, lo que significa que su manejo y cuidado requieren estricta regulación.

La ley es clara: de acuerdo con el Código Penal Federal, dañar, capturar o poner en riesgo a ejemplares de especies protegidas puede derivar en penas de uno a nueve años de prisión y multas de hasta tres mil días de salario.

Por ahora, las autoridades realizaron la necropsia y tomaron muestras para confirmar la causa de muerte, cuyos resultados se darán a conocer en uno o dos meses. Por razones sanitarias, el cuerpo de “Lucho” fue enterrado en la playa.

La Profepa advirtió que no tolerará actos que atenten contra la vida silvestre y que este caso tendrá seguimiento puntual hasta que se esclarezcan los hechos y, en su caso, se apliquen las sanciones correspondientes.

“Lucho” deja un vacío en la laguna de La Ventanilla, pero también un llamado urgente a reforzar el respeto y la protección hacia los animales que dependen de nosotros para sobrevivir.