El 2 de septiembre de 2024, las comisiones legislativas del Congreso Local dictaminaron a favor de la “Ley Carpi”, una significativa reforma que promete asegurar atención médica y terapias permanentes a las víctimas de delitos. La iniciativa, propuesta por el diputado local del PAN, Oswaldo Jiménez, será sometida a votación en una próxima sesión extraordinaria del pleno del Congreso.
La «Ley Carpi» surge como respuesta a la trágica experiencia del activista Felipe Carpinteyro, quien hace un año fue víctima de un asalto a cuentahabiente. La propuesta legislativa tiene como objetivo garantizar que las unidades de salud públicas ofrezcan atención médica integral a las víctimas, abarcando servicios médicos, psicológicos, psiquiátricos y odontológicos según sea necesario.
La iniciativa busca establecer un marco legal que asegure la continuidad de la atención para las personas que han sufrido un delito, reconociendo la importancia de la recuperación física y emocional para su bienestar. Si la ley es aprobada en la próxima sesión extraordinaria, entrará en vigor como una herramienta fundamental para proteger y apoyar a las víctimas en su proceso de recuperación.
La propuesta ha sido recibida con optimismo por parte de varios sectores, que ven en la “Ley Carpi” una medida necesaria para fortalecer el sistema de justicia y apoyo a las personas afectadas por delitos.
Felipe Carpinteyro, es el activista que inspiró esta Ley de ahí el nombre de ‘Ley Carpi’, después de que viviera un asalto a mano armada el pasado 1 de junio de 2022.
Felipe fue interceptado por dos hombres que abordaban una motocicleta, después de que el activista retirara 300 mil pesos; los asaltantes obligaron a Felipe a bajarse de la camioneta que conducía y a entregar el dinero, el joven se rehusó a hacerlo pero lastimosamente fue alcanzado por al menos dos disparos, que le causaron graves heridas en un riñón y en la columna vertebral, dejándolo paralizado de la cintura para abajo.
El violento episodio no solo le robó su movilidad, sino que también lo sumió en una profunda crisis económica. Felipe enfrentó grandes dificultades para costear los gastos médicos y las terapias necesarias para su recuperación. A pesar de la adversidad, logró salir adelante gracias a una serie de rifas y la venta de artículos como ropa y orquídeas. Sin embargo, los gastos continuos para sus tratamientos y traslados a los hospitales seguían siendo una carga considerable.
Es por eso que esta enmienda, inspirada en su dolorosa experiencia no solo representa una mejora en el sistema de apoyo a víctimas, sino que también le da un sentido a su propia lucha. La «Ley Carpi» será sometida a votación en el Congreso Local en una próxima sesión extraordinaria a no más tardar del 14 de septiembre de este año, con la esperanza de que pronto brinde apoyo y justicia a quienes han pasado por situaciones similares a la suya.