Las cuentas no cuadran en Cuautlancingo. En 2022, la administración de Filomeno Sarmiento, alcalde de este municipio, podría haber dejado un probable daño patrimonial de 192 millones 82 mil 351.56 pesos. O al menos, eso sugiere el último informe individual del ejercicio fiscal 2022, presentado por la Auditoría Superior del Estado de Puebla (ASE).
La ASE no se quedó corta: 29 pliegos de observaciones fueron emitidos para la administración de Sarmiento, destacando irregularidades que involucran servicios como eventos musicales, carnavales, arreglos florales y servicios de organización de eventos. Solo en este rubro se habla de 44 millones 88 mil 380.64 pesos que no parecen tener un respaldo claro.
Otro aspecto que no se entregó con «claridad» fue la compra de un terreno, cuya adquisición fue registrada, pero no respaldada con la documentación requerida. El Ayuntamiento de Cuautlancingo también se quedó corto con la entrega de evidencias para justificar la compra y distribución de juguetes por el Día de Reyes. Sin padrón de beneficiarios ni cartas de agradecimiento, la cifra de este posible daño patrimonial es difícil de aclarar.
La ASE detectó, además, un probable daño patrimonial de 16 millones 371 mil 458.63 pesos, relacionado con la reparación y mantenimiento de vehículos y servicios de cerrajería en áreas del Ayuntamiento. Sumemos a la cuenta otro rubro interesante: 14 millones 941 mil 784.94 pesos por servicios de desarrollo de software, consultoría y defensa legal en materia laboral. Los documentos, sin embargo, no explican mucho sobre la naturaleza de estos trabajos.
A esto se añaden 8 millones 829 mil 568.34 pesos que no fueron justificados en la compra de herramientas y refacciones menores. Pareciera que los detalles de estos gastos simplemente se evaporaron. Ni qué decir de obras menores, como la demolición del edificio del DIF Municipal, por la cual solo se tiene registro de un costo de 15 mil 702.95 pesos. Todo esto, mientras la rehabilitación del drenaje y el panteón municipal sumaron poco más de medio millón de pesos, cifras menores, pero que igual merecen atención.