La Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) conmemora cuatro décadas de trabajo académico, investigación y desarrollo tecnológico del posgrado en Dispositivos Semiconductores, uno de los programas pioneros en el país en la formación de especialistas dedicados al estudio, caracterización y creación de materiales semiconductores.
Este programa, impartido en el Centro de Investigaciones en Dispositivos Semiconductores (CIDS) del Instituto de Ciencias de la BUAP (ICUAP), ha sido un referente nacional en la generación de conocimiento científico aplicado, consolidándose como semillero de investigadores, docentes e innovadores en áreas clave de la electrónica, la energía y la tecnología médica.
Cuatro décadas formando talento de alto nivel
La Maestría en Dispositivos Semiconductores cumple 40 años desde su aprobación por el Consejo Universitario en 1985. A la fecha, ha egresado 55 generaciones y 198 titulados, convirtiéndose en un referente académico en la región centro-sur de México.
Con una primera generación de solo cuatro estudiantes, el programa inició actividades en mayo de 1986 y dos años después fue reconocido en el Padrón de Excelencia del Conacyt. En su desarrollo participaron académicos de la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas, del CINVESTAV y del INAOE, fortaleciendo su calidad científica desde sus primeros años.
Por su parte, el Doctorado en Dispositivos Semiconductores celebra 20 años de existencia. Fue aprobado en 2005 e inició actividades en 2006, año en que se puso en marcha el difractómetro de rayos X, fundamental para la caracterización de nuevos materiales semiconductores.
Este programa ha formado a 84 doctores en ciencia a lo largo de 37 generaciones, especializados en el desarrollo de materiales y circuitos integrados, así como en el diseño de tecnologías aplicadas a dispositivos electrónicos como celulares, computadoras, televisores y automóviles.
De los laboratorios a la innovación tecnológica
Desde su creación, el CIDS ha sido un espacio donde la ciencia se traduce en soluciones reales. En 1987, apenas un año después de que la maestría comenzara, se desarrollaron prototipos de electroestimuladores para rehabilitación de personas hemipléjicas, un estimulador magnético para el tratamiento de fracturas y un oxigenador de sangre.
Un año más tarde, el centro incursionó en el diseño de equipos de hipertermia para pacientes oncológicos del Hospital de Especialidades del IMSS, abriendo camino a la aplicación médica de los semiconductores.
En 1992, el equipo del CIDS fabricó el primer láser semiconductor de arseniuro de galio en Puebla, y continuó con innovaciones como circuitos integrados, una mano electromecánica, una laringue electrónica y marcapasos externos, además de herramientas para diagnóstico del lenguaje.
Durante los años 2000, los investigadores lograron avances notables: el silicio poroso (2005), prototipos para estimulación magnética transcraneal, paneles solares de concentración, alineadoras de mascarillas para microelectrónica y sistemas de epitaxia en fase líquida.
En 2006 se simuló el funcionamiento de dispositivos microelectromecánicos y se creó un diodo electroluminiscente metal-semiconductor, también con base en silicio poroso.



Vinculación y logros recientes
En los últimos años, el CIDS ha reforzado su colaboración con instituciones nacionales. En 2023, se integró al proyecto “Innovación y desarrollo de prototipos de módulos fotovoltaicos a partir de celdas solares experimentales”, impulsado por el Laboratorio Nacional de Innovación Fotovoltaica y Caracterización de Celdas Solares (LIFYCS) del IER-UNAM.
Durante 2024, dos de sus proyectos obtuvieron títulos de patente:
- Sistema para síntesis de películas fotoluminiscentes oxicarburos de silicio (28 de enero).
- Microcavidades en el UV basadas en silicio poroso (12 de junio).
Estos logros reafirman la vigencia y proyección del posgrado en el desarrollo de tecnologías sostenibles y aplicaciones científicas con impacto social.
De un pequeño laboratorio a un referente nacional
El origen del CIDS se remonta a 1976, cuando un grupo de profesores del CINVESTAV —entre ellos Javier Villanueva Lomelí, Juvencio Monroy Ponce (rector de la BUAP de 1989 a 1990), Carlos López Ramírez y Alejandro Pedroza Meléndez, creador del famoso robot pianista Don Cuco “El Guapo”— fundó el Laboratorio de Semiconductores.
Aquella iniciativa fue el punto de partida para lo que hoy es un centro de investigación con más de cuatro décadas de aportes científicos, innovación tecnológica y formación de especialistas que han contribuido al desarrollo de la electrónica en México.
Una tradición de ciencia con futuro
A 40 años de su creación, el posgrado en Dispositivos Semiconductores de la BUAP mantiene su compromiso con la excelencia académica y la innovación tecnológica.
Su historia no solo refleja el avance de la ciencia en Puebla, sino también el papel clave de la universidad en la formación de generaciones de investigadores que hoy impulsan el progreso científico del país.


