Ciudad de México, 21 de agosto de 2025.– México está a punto de dar un gran salto en su infraestructura eléctrica. La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo anunció este jueves una inversión de 8 mil 177 millones de dólares para fortalecer el sistema de transmisión de energía eléctrica de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), beneficiando a 50 millones de usuarios en todo el país.
Durante la conferencia matutina, la presidenta destacó que México es uno de los pocos países con un sistema eléctrico totalmente interconectado, y que ahora se encuentra en su fase final de conexión con la península de Baja California. “Realmente se interconecta toda la República con este sistema; son 275 proyectos de nuevas líneas y 524 subestaciones distribuidas en todo el país”, explicó Sheinbaum.
La secretaria de Energía, Luz Elena González Escobar, detalló que estas obras modernizarán la infraestructura que transporta la energía desde las centrales de CFE hasta las subestaciones, donde se transforma y distribuye a hogares, industrias y comunidades. Actualmente, la red de transmisión cuenta con 111 mil kilómetros de líneas y 2 mil 300 subestaciones, casi nueve veces la distancia entre México y China.



La directora general de la CFE, Emilia Esther Calleja Alor, indicó que más de 5 mil trabajadores participan en labores de modernización, mantenimiento, inspección y pruebas de campo. “Estas obras no solo atenderán la demanda de los Polos de Desarrollo para el Bienestar, sino que también conectarán mejor a todas las regiones del país”, agregó.
El plan de expansión contempla distintas zonas:
- Zona Norte: 92 proyectos, 23 ya concluidos, con 137 líneas de transmisión nuevas y 247 subestaciones, beneficiando a 6 millones de hogares.
- Zona Centro: 49 proyectos, 7 terminados, con 90 líneas y 181 subestaciones para 8.5 millones de hogares.
- Zona Sur: 30 proyectos, 5 ya concluidos, con 48 líneas y 96 subestaciones para 1 millón de hogares, especialmente en Veracruz, Oaxaca y Chiapas.
Además, la CFE está implementando la Red Eléctrica Inteligente, un sistema de monitoreo y control a distancia que permite ajustar el flujo eléctrico según la demanda, detectar fallas de manera remota y modernizar toda la infraestructura con tecnología de punta, desde transformadores digitales hasta sensores móviles y mapeo 3D.
Con esta inversión histórica, el gobierno federal busca reducir pérdidas, descongestionar la red y garantizar un suministro confiable, mientras se prepara para atender la creciente demanda del sector industrial y los nuevos desarrollos urbanos.
Como dijo Sheinbaum: “No todos los países tienen sistemas interconectados nacionales; México sí. Esta inversión fortalece la energía de todo el país y asegura que llegue a donde más se necesita”.

