La Ciudad de México está a punto de ser testigo de un evento único y poco común en la actualidad: la llegada de la icónica locomotora de vapor Empress 2816, proveniente de Calgary, Canadá. El pasado miércoles 24 de abril, la Empress 2816 comenzó su épico viaje nombrado: Final Spike Steam Tour, organizado por Canadian Pacific Kansas City, recorriendo tres países – Canadá, Estados Unidos y México – en una travesía muy similar a la migración de la mariposa monarca; que se encuentra en grave peligro de extinción y ahora sin su defensor Homero Gómez, año con año su población decrece.
Respecto al tren con su elegante diseño de la década de 1930, la locomotora tipo Hudson 464 está lista para recorrer once paradas en diversas ciudades a lo largo de su trayecto. Este viaje no solo celebra el primer aniversario de la fusión entre Canadian Pacific y Kansas City, sino que también representa una unión entre tradición y modernidad en la industria ferroviaria. La Empress 2816, construida en 1930 por Montreal Locomotive Works, fue diseñada para el servicio de carga y pasajeros en Canadá, y ahora, casi un siglo después, continúa siendo un emblema de una época dorada para el transporte ferroviario.
En una era donde la velocidad domina el panorama del transporte, hay algo profundamente mágico en las máquinas de vapor. La Empress 2816 no es solo una reliquia; es un testigo viviente de la historia, habiendo visto pasar décadas sobre los rieles. Desde sus días de gloria transportando carga y pasajeros en Canadá, hasta su restauración meticulosa, la Empress ha sido testigo de la evolución del transporte y ahora se prepara para unirse a la modernidad sin perder su esencia nostálgica.
La Ruta en México
El recorrido de la Empress 2816 por tierras mexicanas comenzará el 27 de mayo en Laredo, seguirá hacia Monterrey el 29 de mayo, y llegará a San Luis Potosí el 2 de junio, se realizarán algunas parada de inspección en distintos puntos y el 4 de junio la locomotora arribará a la Ciudad de México.
Finalmente, la Empress regresará a Canadá el 8 de junio, marcando el fin de su viaje histórico.
¿Un medio de Transporte que se fue perdiendo o recuperando?
Hace no tanto tiempo, el tren de vapor era el corazón del transporte, moviendo personas y mercancías a lo largo y ancho de países enteros. Las locomotoras de vapor, con su inconfundible silbido y la majestuosidad de su diseño, simbolizaban el avance tecnológico y la conectividad entre regiones. Como dirían los políticos de libro; fue Don Porfirio Díaz el rey ferroviario. Sin embargo, con la llegada de los trenes diésel y eléctricos, y más tarde, los aviones y automóviles, el uso de los trenes de vapor fue disminuyendo hasta casi desaparecer.
En la actualidad, la velocidad y la eficiencia son primordiales, y aunque los trenes modernos cumplen con estos requisitos, bueno en México aún estamos en veremos con nuestros Trenes Maya, Interoceánico y otros proyectos que generaron más ecocidio que beneficio. La nostalgia y el romanticismo del tren de vapor han quedado relegados a Museos como el del Ferrocarril en la 11, donde literalmente solo los vemos como cadáveres de un pasado, así como un tren turístico Puebla-Cholula que ya solo quedo como una reliquia.
La Empress 2816 nos brinda una rara oportunidad de revivir esa era dorada del ferrocarril y de experimentar la majestuosidad de una locomotora de vapor en pleno funcionamiento.
Estamos a pocos días de su llegada a nuestro país, y tanto los amantes de las locomotoras como el público en general no pueden perderse este espectáculo único. Ver y escuchar una locomotora de vapor en acción es un viaje al pasado, una experiencia que solo nuestros abuelos pueden recordar.
La Empress 2816 no es solo una máquina; es una pieza viviente de la historia que nos recuerda la importancia de los trenes en la configuración de nuestro mundo moderno.
Así que, prepárense para recibirla y ser parte de este viaje histórico. La majestuosidad y la nostalgia del tren de vapor están a punto de revivir en México. ¡No se lo pierdan!