Sheinbaum gana debate según encuesta de Electoralia; Xóchitl según Massive Caller; Máynez ganador en los memes.
Dimes, diretes, chismes, muchos memes y una que otra propuesta, así fue el primer debate presidencial entre Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez, candidatos a ocupar la silla más importante de México.
«La sociedad que queremos» fue el nombre que llevó este primer encuentro entre los aspirantes a la presidencia de México; diseñado con un formato casi utópico donde la participación ciudadana fue medular, pues mexicanos y mexicanas de toda la república formularon casi 24,000 preguntas que luego fueron filtradas, seleccionadas por Signa Lab y solo 30 llegaron a ser planteadas durante este ejercicio democrático, que tuvo una duración estimada de 120 minutos.
La dinámica del debate se dividió en tres segmentos centrados en temas aprobados por el órgano electoral, abarcando educación y salud, transparencia y combate a la corrupción, y no discriminación, grupos vulnerables y violencia contra las mujeres. Cada candidato tuvo un tiempo para presentar brevemente sus posturas y estrategias para abordar estos desafíos, pero más para sacar sus gráficas de logros pasados, echarse flores y por su puesto tirar acusaciones a sus adversarios.
Cada quien llevaba su discurso, sus temas y por supuesto sus consignas para dañar a sus oponentes.
Claudia Sheinbaum, candidata de la alianza «Sigamos Haciendo Historia», llegó a la sede en carrito viejo, nada ostentoso. Su participación en general fue «prudente», es decir, le jugó a la segura. Enfocó su tiempo en hablar de la continuidad de la transformación, resaltó los lemas de la 4T, ya saben el «combatir la corrupción» y no volver a las prácticas del «prian». Asimismo, hizo hincapié en sus logros, o más bien en las encuestas de satisfacción de sus programas sociales y en todos los premios que su gobierno recibió en áreas de transparencia gubernamental y seguridad.
Xóchitl Gálvez, candidata de la coalición «Fuerza y Corazón por México», llegó al debate en bicicleta, con casco rosa y todo. Ella se dedicó a confrontar a Claudia y uno que otro raspón a Máynez -por no dejar- sus participaciones fueron más señalamientos que propuestas, pero entre lo destacable, presentó iniciativas como «Mi Salud» para reformar el sistema de salud y un amplio esquema de becas educativas. La señora X llegó con una estrategia digital bien planeada, pues durante el transcurso del debate fue lanzando acusaciones y luego ofrecía las pruebas «en tiempo real» a través de sus redes sociales. Además aprovechó para llamar a Sheinbaum «La dama de hielo», un tema que colocó en tendencia.
Jorge Álvarez Máynez, candidato de Movimiento Ciudadano, llegó en autobús, naranja por supuesto. Se posicionó como una tercera opción electoral, proponiendo con una sonrisa de oreja a oreja, mejoras en el sistema de salud y educación, así como la lucha contra la corrupción. De vez en cuando lanzó uno que otro ataque mostrando fotos de sus contrincantes con personajes de mala reputación; como pasa en cada debate. En su discurso destacó su compromiso con la inversión en ciencia y tecnología, y la necesidad de reformas para fortalecer la transparencia gubernamental. Nos regaló un momento memorable cuando intentó presentarse en lenguaje de señas para mostrarse inclusivo y un montón de otros memes.
En cuanto a la percepción del debate por parte de la audiencia, diversas encuestas arrojan resultados divergentes. Según la encuesta de Massive Caller, un 60.1% de los espectadores consideró que Xóchitl Gálvez presentó las mejores propuestas, seguida por un 34.8% que favoreció a Claudia Sheinbaum. Por otro lado, una medición de Electoralia mostró a Sheinbaum como la ganadora con un 55% de las preferencias.