En una emotiva ceremonia realizada en el auditorio del Complejo Cultural Universitario, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) celebró la graduación de 176 estudiantes de la Licenciatura en Medicina, quienes culminaron con éxito su formación académica y están listos para emprender una carrera dedicada al cuidado de la salud y la vida humana.


Durante el acto, la Rectora María Lilia Cedillo Ramírez dirigió un mensaje lleno de calidez, reconocimiento y reflexión. Como científica y también como médica de formación, la Rectora compartió su visión sobre la importancia del componente humano en el ejercicio profesional de la medicina. Enfatizó que, más allá del conocimiento técnico y científico adquirido durante los años de estudio, lo que verdaderamente marca la diferencia en la práctica médica es la sensibilidad, la empatía y el compromiso con el bienestar de los demás.
“Con ese respeto y cariño traten a los demás. Valen mucho para nuestra institución. Recuerden que en el camino seguirán aprendiendo, incluso de cada uno de sus pacientes”, expresó ante los egresados, a quienes también les recordó que cada consulta y cada intervención médica es una oportunidad para crecer como profesionales y como seres humanos.

En representación de la Facultad de Medicina, Claudia Cedillo Rojas, encargada de despacho de la dirección, también compartió palabras significativas para la generación 2019-2025. Su mensaje fue un llamado a la humildad y a la vocación constante de servicio: “Conserven su calidez, respeten su profesión y nunca dejen de trabajar en beneficio de sus pacientes”.
Por su parte, José Iván de la Cruz Mora, quien habló a nombre de sus compañeras y compañeros graduados, transmitió el orgullo, la esperanza y también el sentido de responsabilidad que comparten quienes eligieron la medicina como camino de vida. “No olvidemos el privilegio y la responsabilidad que eso implica. Seamos médicos con técnica, pero sobre todo con alma. La medicina no sólo se ejerce con la mente, sino también con el corazón», afirmó con emoción.
La ceremonia no solo marcó el fin de una etapa académica, sino también el inicio de una nueva fase llena de desafíos, decisiones y aprendizajes continuos. Los 176 egresados ahora se suman al amplio y prestigioso grupo de profesionistas formados en las aulas de la BUAP, una institución que apuesta por una formación integral basada en la excelencia académica y en valores humanistas.
Este evento representa una celebración colectiva del esfuerzo, la disciplina y el espíritu de servicio que caracterizan a los futuros médicos. En tiempos donde el mundo ha recordado con fuerza el papel esencial de la medicina, la BUAP reafirma su compromiso de formar profesionales capaces de sanar con ciencia, pero también con humanidad.


