Mérida, Yuc.– La selva baja caducifolia de la Reserva Cuxtal, en Mérida, fue víctima de la tala y devastación ilegal de casi dos hectáreas. En respuesta, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró de manera total un predio en la comunidad de San Pedro Chimay, donde se pretendía instalar un espacio para la captación de residuos sólidos urbanos.
El operativo se llevó a cabo tras denuncias ciudadanas que alertaron sobre el uso de maquinaria pesada en esta zona de alto valor ambiental. Durante la inspección, realizada el 11 de agosto, los inspectores constataron la eliminación de vegetación nativa como Bursera (simaruba), Dzizilche (Gymnopodium floribundum), Tzalam (Lysiloma latisiliquum) y Jabin (Piscidia piscipula), en una superficie de 1.85 hectáreas.
Además del cambio de uso de suelo sin autorización, la Profepa detectó otras irregularidades:
- Extracción de tierra de monte en tres puntos del predio.
- Instalación de una criba (equipo para separar materiales).
- Uso de materiales de construcción para relleno del sitio.
Todo esto con la intención de habilitar el lugar como centro de captación de residuos sólidos, lo que representaba una amenaza directa para el equilibrio ecológico de la reserva.
Ante los hallazgos, la autoridad ambiental aseguró dos retroexcavadoras, un equipo metálico tipo criba y 4 metros cúbicos de tierra de monte, además de imponer la clausura total temporal de las actividades.
La Reserva Cuxtal es un Área Natural Protegida fundamental para Mérida y su zona metropolitana, ya que garantiza servicios ambientales clave, entre ellos la recarga del acuífero que abastece de agua a miles de habitantes.
La Profepa aseguró que mantendrá estricta vigilancia en esta zona para detener la devastación de la selva y proteger los recursos naturales de Yucatán, enviando un mensaje claro: el saqueo ambiental no quedará impune.

