A finales del mes de octubre, en el Parque Nacional Bandhavgarh, ubicado en la localidad de Madhya Pradesh (India), se reportó la muerte de 10 ejemplares de elefantes por un aparente envenenamiento agudo por toxinas fúngicas, o sea, una combinación de mohos que normalmente se propagan en el alimento a causa de condiciones específicas de humedad y temperatura.
El deceso de estos mamíferos tuvo lugar entre los días 29 y 31 de octubre de este 2024, y, a raíz de la sospecha de envenenamiento se realizó una investigación anunciado por un funcionario forestal del estado, Krishna Murthy.
La mañana de este viernes se dio un preliminar de los resultados de dicha investigación, donde se reveló que los elefantes presentaban gran cantidad de kodo en el estómago, por lo que se determinó envenenamiento por kodo (kodo es un grano que se cultiva principalmente en Nepal e India), así informó la Escuela de Ciencias Forenses y Salud de Vida Salvaje (SWFH) que concluyó como causa de muerte un envenenamiento agudo por hongos en los cultivos. A su vez, declararon resultados negativos para el herpesvirus (una causa común de muerte en elefantes).
Estos resultados han encendido una alarma de atención, pues junto a este reporte, también se informó que los paquidermos gemían noches previas a su muerte muy posiblemente por el dolor que presentaban. Estas declaraciones abren la pregunta si existió negligencia por parte de los directivos del parque al no brindarles la atención necesaria para evitar esta tragedia.
Este caso ha conmocionado a toda India y el mundo pues la protección de esta especie es una tarea importantísima en estas regiones. En la India existe una población de unos 27mil 700 elefantes salvajes, y estos representan a la mitad de los paquidermos en Asia.
Por otro lado, 3mil 500 ejemplares se encuentran en vida en cautiverio y estos 10 elefantes fallecidos pertenecían a una manda de 13 miembros que se cuidaban en el Parque Nacional Bandhavgarh.
